¿Dónde y cómo nace?

El  drama se consolida en Grecia, y es el resultado de ceremonias y cultos de carácter religioso. En un principio, los griegos rendían culto a Dionisos, dios del vino y la alegría, a través de cantos e himnos.

Este dios representaba la fuerza regeneradora de la naturaleza, puesto que, a través del éxtasis que provoca el vino, conseguía renovarse.


Los cantos que se hacían fueron modificándose con el tiempo, hasta llegar a un concepto más cecano a lo que hoy conocemos como Drama. Esta evolución de atribuye a tres dramaturgos:

Esquilo (Eleusis, 525 a. C. – Gela, 456 a.C): Considerado el primer gran representante de la tragedia. Aplicó cambios en los cantos que incluían diálogos, idea de Tespis. Algunas de sus obras son "Las Suplicantes",  "Los Persas" y "Orestíada".

Sófocles ( Grecia, 496 a. C. - Atenas, 406 a. C.) Fue un poeta trágico de la Antigua Grecia, participó también de manera activa en la política ateniense. Introduce a un tercer actor y el decorado de la escena. Una de sus obras más destacadas fue "Edipo Rey".

Tespis: Considerado el primer dramaturgo en introducir el diálogo en el culto.


Con estos cambios se introdujo la escencia del drama: El diálogo.

Teatro de la Antigua Grecia. Aquí es donde se presentaban los himnos dedicados al dios de vino.